El blanqueo de capitales es un delito que consiste en ocultar o disimular el origen de fondos obtenidos de actividades ilegales, para hacerlos parecer legítimos. El metaverso, como entorno virtual, no está exento de este tipo de prácticas delictivas.
En el metaverso, el blanqueo de capitales podría llevarse a cabo mediante la adquisición de activos virtuales, como criptomonedas o tokens no fungibles (NFTs), utilizando fondos obtenidos de manera ilegal. Estos activos virtuales podrían luego ser vendidos a terceros, aparentando ser legítimamente adquiridos.
Sin embargo, los desarrolladores de plataformas en el metaverso están tomando medidas para prevenir y detectar estas prácticas delictivas, como la implementación de medidas de identificación y verificación de usuarios, así como el monitoreo de transacciones sospechosas.
Además, los gobiernos y las agencias reguladoras también están trabajando en la creación de regulaciones específicas para el metaverso, con el fin de prevenir el blanqueo de capitales y otros delitos financieros en este entorno virtual.
Actualmente, no existe una moneda única del metaverso. Cada plataforma virtual puede tener su propia moneda, token o sistema de intercambio. Por ejemplo, en Second Life, la moneda virtual se llama Linden Dollars, mientras que en Decentraland se utiliza MANA como token de intercambio.
Además, existen criptomonedas como Bitcoin, Ethereum y otras que pueden ser utilizadas en algunas plataformas del metaverso, como medio de pago para la adquisición de activos virtuales.
Es posible que en el futuro, se desarrolle una moneda única del metaverso, que permita una mayor interoperabilidad entre plataformas y facilite las transacciones dentro del entorno virtual. Sin embargo, esto dependerá de la evolución del metaverso y de la adopción que tenga por parte de la sociedad y la industria.